Misael Rodríguez y Sergio Moreno han desarrollado en CICUS el Workshop de telepresencia artística. Diseño e instalación de un espacio escénico distribuido. Como colofón al mismo, el miércoles 27 de mayo tuvieron el mejor final posible, desarrollando una Jam Session distribuida.
Mejor dejamos al propio Misael explicar el desarrollo de la misma, en la que fablab prestó su colaboración hace algunas semanas con mucho gusto:
Ayer hicimos en el CICUS la primera Jam Session distribuída de la que tenemos constancia. Empleando tecnologías de telepresencia y software libre.
La idea de base es simple; los músicos de ambos sitios están físicamente separados pero tocan juntos, viéndose, oyéndose entre ellos como si compartieran el mismo espacio.
El público de cada uno de los escenarios ve y escucha a todos los músicos; unos están presentes, de forma tangible, y los otros lo están a través de medios técnicos (se verán y oirán a su lado). El concierto se puede seguir desde cualquiera de los dos espacios.
Aunque la idea de base sea simple, el desarrollo técnico del evento no lo es tanto. Para que sea posible la actuación en vivo el retraso de un espacio a otro debe ser imperceptible para los músicos. El miércoles el sonido tardó unos 3 ms. en viajar de un espacio a otro, aproxima-damente lo que el sonido tarda en recorrer un metro a través del aire. Fue el primer concierto distribuido empleando telepresencia del que tenemos constancia, fruto de un largo (y precioso) periodo de investigaciones, pruebas, errores, y momentos de desesperación aliñados con trocitos de euforia. Estamos muy contentos con el resultado.
(foto de Javier Gutiérrez)
Todo el desarrollo técnico esté hecho con software libre. Las posibilidades que ofrece para mutarlo, modificarlo y jugar con él son tremendas: el retraso seguirá siendo imperceptible si los músicos están separados hasta 600-800 km, por ejemplo, permitiendo performances distribuidas con escenografías más complejas (sección rítmica en Madrid desde un servidor central, cantante en Barcelona, guitarra en Córdoba, danza desde Gijón... todos juntos y revueltos en tiempo real) . El audio y el vídeo van en varios canales independientes, sin pérdidas de calidad, lo que permite aún más posibilidades. Caso práctico: unir espacios de España y América Latina en eventos donde la latencia no es tan crítica; danza, teatro, presentaciones poéticas, charlas con el director y actores de una película tras su proyección, etc. La latencia entre espacios es muy inferior a la de una llamada telefónica o una videoconferencia convencional, pero la calidad de audio y vídeo sigue siendo varias veces mas alta que la de un DVD estándard; hablamos de retardos con Buenos aires, por ejemplo, inferiores a los 300 ms.
En fin, que fue una Jam musical y, también, la presentación del primer sistema de telepresencia dedicado a música en vivo libre, desarrollado íntegramente con software libre desde Andalucía. Esta investigación ha sido posible gracias a los espacios y los medios proporcionados por el CICUS, y la colaboración del Fablab de la ETSA, del alumnado del Taller de Telepresencia y de Buenaventura Producciones.