Cuando desde Fablab Xtrene Almendralejo nos propusieron participar en la Feria Tecnológica y Educativa Demolabs Maker en Llerena siempre te planteas si el día a día del laboratorio nos permitirá estar. Pero desde la Escuela nos dieron el visto bueno y el fablab de la Universidad de Sevilla marcó en rojo la cita de septiembre.
Y había que estar, había que estar por la cantidad y, sobre todo, calidad de las aportaciones, propuestas y ganas que se vieron en este rincón de Extremadura que tan bien está tratando eso que llaman laboratorios ciudadanos.
Si bien la organización nos trató especialmente bien, no deja de ser curioso cómo el intercambio de experiencias aporta esa riqueza que necesitan los fablabs para seguir su camino.
Nuestra aportación a DemoLab Maker llevaba dos líneas que parecieron gustar mucho a los visitantes y participantes. La primera fue la recuperación por Jose Antonio Alba, profesor de la ETSA, del cajón de arena virtual que tanto gustó cuando David Sánchez propuso hacer el primero en 2015 tras conocer el proyecto de la Universidad de California.
Por otro lado, nuestras gafas de realidad virtual siguen asombrando a los que comprueban cómo las aprovechan nuestros estudiantes de arquitectura para sus proyectos. Desde niños a abuelos de más de 80 años pudieron comprobar cómo el futuro no está tan lejos.
En definitiva, una experiencia que esperamos repetir porque en tres días se aprende más que en meses, porque la organización cuida, dentro de sus limitaciones presupuestarias, de que los espacios de encuentro sean muy cómodos y atractivos y porque se conocen y desvirtualizan a las personas que hacen que el mundo maker en España y Portugal siga su marcha impregnando de tecnologías libres los caminos por los que pisa.
Más información: